Durante los últimos días de febrero se llevó adelante una función para niños con trastorno del espectro autista. La propuesta, de acceso libre y gratuito, tuvo una gran repercusión en la comunidad.
Son funciones especialmente adaptadas para personas con discapacidad sensorial, espectro autista, trastornos de aprendizaje y otras discapacidades relacionadas con la comunicación.
La adaptación consiste principalmente en reducir los estímulos sensoriales suavizando los sonidos. También hay libertad de movimiento en la sala, ya que las puertas permanecen entreabiertas para que las personas entren y salgan cuándo así lo deseen, y las luces no se apagan del todo, sólo se baja un poco la intensidad.
Además, la película se proyecta directamente a la hora señalada, sin publicidades y sin tiempo de espera.