“Tenemos cosas maravillosas y los invitamos a venir a vivir la experiencia que significa este Museo” disparó como gancho para que más personas visiten en predio en el Parque de la Estación, donde ayer se inauguró la exposición "Coser sueños, bordar historias, Una experiencia colectiva en el Carnaval”.
“Elegimos las personas más antiguas del Carnaval porque son quienes lo vivieron y empezaron a bordar este sueño y a coser esta historia tan linda. Coser y bordar son metáforas de lo colectivo, de la actividad entre las personas hacedoras del Carnaval que es su magia más especial”, precisó el curador.
“Cuando entras al Museo te atrapan estas historias que se van entrelazando como una serpentina, como el papel picado que vuela al aire en un Matecito. Te vas a encontrar con los juegos de agua, con la música descubriendo que Aníbal Troilo estuvo tocando en una comparsa y la música de tango, de marchinias, de las cornetas murgueras o las batucadas. Esos sonidos lo vas a poder escuchar en tu celular escaneando un código QR lo que te permite sumergirte en el universo del Carnaval”, describe con orgullo Ayala.
Si bien el mundo carnavalesco es muy extenso y no se puede abarcar en una muestra o hablando de las comparsa, murga o el Carnaval del País, se deben rescatar el entramado de historias, imágenes y sonidos que nos permiten pensar y sentir el Carnaval.
Y en esa línea, Martín Ayala le confesó a R2820 cuáles son sus “dos joyitas” en esta cuarta muestra. La primera es un “traje de la escuela veneciana, de 1988, que lució José Luis Gestro y dentro de sus botas encontramos papel picado de esa edición que colocamos en esta vitrina con serpentinas de la década de 1920”.
Como segundo gran aporte del Museo “está en un retrato el músico de la Orquesta Continental de Jazz que fue el primero en hacer música para la comparsa” y también suma la foto de “Juancho Martínez bailando en un patio murguero del club Black River con la Barra Divertida en la década de 1970”.
Los aportes recientes de integrantes actuales y ex participantes del Carnaval del País, de la hermana de José Luis Gestro y de muchas personas que sienten la pasión que despierta cada verano siguen fortaleciendo el acervo cultural y público del Museo del Carnaval, espacio que vale la pena descubrir o revivir.